Ya llevo una semana sin mascarilla y estoy recuperando mi voz. Al principio me chocaba, pero poco a poco la voy reconociendo. Me costaba bastante hablar con la mascarilla y tampoco entendía bien a los demás. No quiero volver a llevarla otra vez para las personas sordas, como yo, ha sido muy duro. Se sufre. Poco a poco se va normalizando, pero aún hace falta mucha paciencia. Espero que quiten pronto las mascarillas al 100%. Algunos compañeros no se la quieren quitar porque su situación es complicada por su enfermedad, por el miedo, por cualquier cosa. Les entiendo pero me gustaría cuando hablo con ellos que se la quiten y luego se la vuelvan a poner. A mí también me ha costado, la semana pasada cuando me lo dijeron como no me lo esperaba no me lo creía.
En la residencia también me la quité; pero el fin de semana me llamaron la atención y ayer empezaron otra vez a repartir mascarillas y volvieron a hacerlo. Les contesté que no, que no me la iba a poner porque ya no era obligatorio y al final me dejaron; pero me parece fatal.
Laura
Sé lo que ha significado esta obligación de llevar mascarilla para tí, cómo ha supuesto una barrera en tu comunicación, feliz de ver que ya no es necesaria para tí con la mejora en tu comunicación que esto supone. ¡Un abrazo Laura!
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