El sábado, día 6 de febrero, me recogieron mis entrenadores porque empezamos la liga de boccia. Tuve dos partidos consecutivos. El primer partido lo gané 7- 1 y el segundo lo perdí 8-1. Sobre todo me costó mucho el segundo porque me bloquearon las jugadas y no pude hacer nada.
Comimos allí, en el pabellón con todo mi equipo. Me gusta estar con ellos pero llegué a casa muy casado. Terminó la jornada cerca de las 19:30 de la tarde. Son casi nueve horas y media en el pabellón. Me llevan de mi casa a las 6:30 de la mañana. Hacía mucho frió en el pabellón de Las Rozas, no tenía calefacción y tuve que jugar uno de los partidos con el abrigo puesto.
Comimos allí, en el pabellón con todo mi equipo. Me gusta estar con ellos pero llegué a casa muy casado. Terminó la jornada cerca de las 19:30 de la tarde. Son casi nueve horas y media en el pabellón. Me llevan de mi casa a las 6:30 de la mañana. Hacía mucho frió en el pabellón de Las Rozas, no tenía calefacción y tuve que jugar uno de los partidos con el abrigo puesto.
Antonio Diánez
OTRA VEZ SERÁ QUE GANE TU EQUIPO, ANTONIO...
ResponderEliminarMUY BIEN ESCRITO ESTE ARTÍCULO SOBRE BOCCIA, QUE DE VEZ EN CUANDO NOS INTERESA SABER CÓMO VA LA LIGA Y APRENDEMOS ASPECTOS NUEVOS DE ESTE DEPORTE.
Y VALGA TAMBIÉN DE DENUNCIA POR ESE FRÍO QUE HACÍA EN EL PABELLÓN...HOMBRE QUE PONGAN UN POCO DE CALEFACCIÓN, QUE AUNQUE HAGAS EJERCICIO, NO ESTÁS TODO EL TIEMPO JUGANDO SUDANDO...QUE PASAS MUCHO TIEMPO ALLÍ MIRANDO TAMBIÉN...
Muchas gracias Teresa
ResponderEliminarUn Saludo.